¿Por qué es importante celebrar los logros de otras mujeres?

Por Polifacetik Staff 

Si bien es cierto hombres y mujeres han sido protagonistas de la historia, las mujeres hemos sido marginadas de la misma y frecuentemente hasta desaparecidas. Esto no quiere decir, que no haya habido mujeres que hicieron historia, claro que hemos estado presentes en cada momento de la historia de la humanidad. Sin embargo, la historia ha sido escrita por hombres para ensalzar sus triunfos y fortalecer su masculinidad. Hemos sido privadas de la educación, evitando el acceso a puestos de liderazgo o roles sociales. Pero siempre han existido mujeres pioneras capaces de romper el techo de cristal, abriendo nuevas brechas.

Cuando las futuras generaciones no encuentran una heroína o una mentora, continúan asumiendo que esa posición, profesión, deporte o cualquiera que sea la actividad está reservada exclusivamente para el sexo masculino. Sin embargo, como lo dijo Gerda Lerner en su libro “la creación del patriarcado” el sexo es asignado por la naturaleza, pero el género es una serie de reglas o comportamientos que definen cual será la conducta apropiada para ambos sexos. Es decir, son roles culturales más no naturales que cambian con el tiempo y se ajustan a la realidad que vivimos. Está en cada mujer y hombre cambiar su entorno.

Actualmente sabemos que la frase alguna vez dicha por Freud: “Anatomía es destino” ya no es parte de nuestra realidad, los estereotipos en los que habíamos vivido han ido cayendo uno a uno. Hoy los logros de muchas mujeres nos muestran que tenemos las mismas capacidades para desempeñarnos en cualquier rol que podamos añorar. Sin embargo, es imperativo rescatar a las heroínas de antaño, para cambiar los paradigmas existentes y celebrar los logros de las presentes generaciones para crear un mejor futuro. Cuando la infancia no se ve identificada en la historia de su contexto esta condenado a repetir la historia, en este caso los estereotipos de género que tanto dañan el tejido social. 

Cuando una mujer logra metas que por generaciones le ha sido negado al género, no nada más conquistó esa cima para beneficio propio, sino para el beneficio colectivo del género femenino. Logramos cambiar nuestro entorno y el de nuevas generaciones, como alguien atrás de nosotras lo hizo por nosotras, ejemplo de ello es el derecho al voto. 

¡Celebremos los triunfos femeninos uno a uno para dejar un mejor futuro!

 

 

 

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